*** w05 15/3 pág. 23 Puntos sobresalientes del libro de Primero de Samuel ***
1 Samuel 15:22-25, 30. Tengamos cuidado de no caer en alguna forma de conducta insolente, sea que se evidencie en la desobediencia o en una actitud arrogante (Proverbios 11:2).
CAPITULO 14:
g83 8/2 págs. 20-21 “Según su fe” - 1 Samuel 14:1-23
La nación de Israel se hallaba bajo la dominación de los filisteos. El rey Saúl organizó un ejército para liberar a
Israel, pero los filisteos prevalecieron y los israelitas se pusieron a cubierto. En aquel momento crítico, Jonatán, el
hijo de Saúl, dijo a su escudero: ‘Crucemos a la avanzada de los filisteos. Quizás Jehová obre por nosotros.’
‘Vamos a exponernos a ellos. Si nos dicen: “¡Suban contra nosotros!”, lo haremos, porque eso será señal de
que Jehová está con nosotros.’
Se expusieron, y los filisteos exclamaron: ‘¡Los hebreos están saliendo de sus agujeros!’. Gritaron a Jonatán y
a su escudero: “¡Suban a nosotros, y les haremos a saber una cosa!”. ¡Era la señal de Jehová! “Sube detrás de
mi —dijo Jonatán a su escudero— porque Jehová ciertamente los dará en la mano de Israel”.
Ambos comenzaron a subir hasta la avanzada de los filisteos.
Puesto que el enemigo era numeroso, Jonatán y su escudero se colocaron de espalda uno al otro y pelearon
con los filisteos hasta que veinte de éstos yacieron muertos por el suelo. En el momento crítico, Jehová ‘obró por
ellos’.
¡Temblor de tierra! ¡Confusión! En desconcierto, filisteo peleó contra filisteo.
Los israelitas salieron en multitud de sus escondites y se unieron a la batalla, y sus enemigos huyeron en
confusión.
LECCIÓN PARA NOSOTROS: Meditemos en las palabras: “Quizás Jehová obre por nosotros”. Fe en que
Dios movería a Jonatán a tomar acción. Jehová si obró. Israel salió de su escondite, los filisteos huyeron, y
“Jehová procedió en aquel día a salvar a Israel” (1 Samuel 14:23). Todo gracias a la fe de Jonatán. Los
cristianos de hoy no participan en una guerra carnal como lo hicieron los siervos de Jehová de tiempos pasados.
No obstante, sí necesitamos Su apoyo en las actividades cristianas que efectuamos hoy, y cuando progresamos
con fe, damos a Jehová causa para que obre a favor de nosotros. Jesús dijo: “Según su fe, sucédales” (Mateo
9:29). Jehová extiende esta invitación: “Pruébenme, por favor” (Malaquías 3:10). Por eso, seamos como Jonatán
y obremos según nuestra fe firme. “Quizás Jehová obre por nosotros” también.
1 Samuel 15:22 "el obedecer es mejor que un sacrificio". Aunque Jehová recuerda en todo momento de que somos polvo, sabe que pese a ello podemos darle algo que siempre nos ha pedido: Obediencia. 1 de juan 5:3 nos recuerda que sus mandamientos no son gravosos. Así que una manera de someternos a su autoridad es obedeciendo el código moral que nos da la Biblia, como amando lo que el ama y odiando lo que el odia.
1 Samuel 15:20,21 vemos que Saúl culpó al pueblo por su erróneo acto de desobediencia. Y esto nos hace ver que debido a la vergüenza que acompaña a cometer un error la tendencia es culpar a otros. Así que para NO caer en la misma trampa debemos actuar sabiamente y admitir nuestros errores. Porque justamente la manera como nos enfrentamos a nuestras equivocaciones puede afectar nuestra vida.
1 Samuel 15:22. El que Saúl NO actuara conforme a las reglas NO le fue aceptable a Jehová. La lección que esto encierra es clara: NO puede haber flexibilidad en cuanto a la obediencia a Dios. No hay sustituto para la obediencia; no se puede conseguir el favor de Dios sin ella. No obedecer es rechazar la palabra de Jehová, demostrar que realmente no se cree, no se confía o no se tiene fe ni en esa palabra ni en su Fuente. Por lo tanto, el que desobedece no es diferente del que practica adivinación o utiliza ídolos 1 Samuel 15.23
1 Samuel 15:24, 26. Las serias consecuencias de ceder al temor del hombre se ilustran muy bien en el caso del rey Saúl. Cuando el profeta Samuel lo confrontó con el hecho de que no había seguido las instrucciones divinas en una campaña en contra de los amalequitas, Saúl admitió: “Temí al pueblo y por eso obedecí su voz.” El resultado fue que Jehová lo rechazó como Rey sobre Israel. Si no queremos que el Todopoderoso nos rechace, es vital que estemos más interesados en nuestra posición ante Él que en nuestra aprobación ante los hombres.
1 Samuel 15:20,21 vemos que Saúl culpó al pueblo por su erróneo acto de desobediencia. Y esto nos hace ver que debido a la vergüenza que acompaña a cometer un error la tendencia es culpar a otros. Así que para NO caer en la misma trampa debemos actuar sabiamente y admitir nuestros errores. Porque justamente la manera como nos enfrentamos a nuestras equivocaciones puede afectar nuestra vida.
1 Samuel 15:22. El que Saúl NO actuara conforme a las reglas NO le fue aceptable a Jehová. La lección que esto encierra es clara: NO puede haber flexibilidad en cuanto a la obediencia a Dios. No hay sustituto para la obediencia; no se puede conseguir el favor de Dios sin ella. No obedecer es rechazar la palabra de Jehová, demostrar que realmente no se cree, no se confía o no se tiene fe ni en esa palabra ni en su Fuente. Por lo tanto, el que desobedece no es diferente del que practica adivinación o utiliza ídolos 1 Samuel 15.23
1 Samuel 15:24, 26. Las serias consecuencias de ceder al temor del hombre se ilustran muy bien en el caso del rey Saúl. Cuando el profeta Samuel lo confrontó con el hecho de que no había seguido las instrucciones divinas en una campaña en contra de los amalequitas, Saúl admitió: “Temí al pueblo y por eso obedecí su voz.” El resultado fue que Jehová lo rechazó como Rey sobre Israel. Si no queremos que el Todopoderoso nos rechace, es vital que estemos más interesados en nuestra posición ante Él que en nuestra aprobación ante los hombres.