Lecciones para nosotros:
1 Samuel 16:6, 7. En vez de quedar impresionados por la apariencia externa de los demás o juzgarlos apresuradamente, procuremos verlos como Jehová los ve.
1 Samuel 17:47-50. Podemos enfrentarnos con valor a la oposición o la persecución instigada por enemigos semejantes a Goliat porque “a Jehová pertenece la batalla”.
1 Samuel 18:1, 3; 20:41, 42. Podemos encontrar amigos verdaderos entre los que aman a Jehová.
1 Samuel 16:7 A diferencia del hombre quien tiende a juzgar por la mera apariencia, Jehová ve lo que hay en el corazón. Por lo tanto aprendamos a cultivar cualidades como amor, gozo, paz, gran paciencia, bondad, fe, apacibilidad y autodominio. Solo así adquiriremos la verdadera belleza interior la cual tiene un valor duradero a los ojos de Jehová.
1 Samuel 17:45 Me enseña a ponerme la armadura de David (Una confianza plena, absoluta en Jehová) aún q Goliat estaba armado hasta los dientes y era de una estatura extraordinaria, David no temió ya q tenía la seguridad q contaba con el apoyo de su Creador. Esta es la verdadera armadura q los cristianos debemos de ponernos y NUNCA temer a las personas de nuestro territorio, ya q SIEMPRE contamos con la ayuda de Jehová, siempre y cuando le seamos leales...
1 Samuel 18:1
Podemos encontrar amigos verdaderos entre los que aman a Jehová, sin importar la edad
Y que ocupamos más hermanos dentro de la congregación como Jonatan . El estuvo pendiente observando las buenas cualidades de David. Tenemos muchos jóvenes que ocupan de un amigo como Jonatan, muchos de estos jóvenes que no tienen padres en la verdad. En ocasiones esperamos mucho de nuestros jóvenes que tomen la iniciativa para entablar una amistad con los adultos y se nos olvida que son inexpertos , aquí Jonatan nos da una clara lección nosotros los adultos qué tenemos mas experiencia y madurez espiritual tenemos que tomar la iniciativa.
1 Samuel 16:18. Antes de ser rey de Israel, cuando aún era joven, David ya tenía fama de “habla[r] con inteligencia” . Su amistad con Dios lo preparó para hablar de forma clara, enérgica y persuasiva aun en circunstancias muy difíciles (1 Samuel 17:34-37, 45-47). Por lo tanto, debemos tener la certeza de que, en lo que se refiere a nuestra adoración, Jehová también nos ayudará —como hizo con David— a saber expresarnos persuasivamente y nos dará “la lengua de los enseñados”. Queda en cada uno, aprovechar las oportunidades de pulir nuestras dotes, aprendiendo a hablar bien en público.